sábado, 16 de enero de 2010

Expertos en sismología creen que edificaciones en RD no están preparadas para sismo de gran magnitud



SANTO DOMINGO, República Dominicana.- La República Dominicana no está preparada para un sismo de la magnitud que el de Haití. Según geólogos y expertos en la construcción, muchas edificaciones del país se levantan sin normas.


Un desastre similar al del vecino país podría sobrevenir en territorio dominicano, ya que según expertos el desarrollo construido durante años, no resistiría una fuerte sacudida de 7 grados en la escala de Ritcher.


Las edificaciones levantadas a partir de la década de los 70 desde ya deben ser revisadas y reforzadas, por que el sismo del pasado martes puede ser el anuncio de otros.


Geológicamente la isla que compartimos con Haití es muy compleja debido a las diferentes formaciones naturales, que dificultan el comportamiento de la tierra.


Y es que en el país existe la cultura de construir sin un previo estudio del suelo.


Tras la destrucción en Haití, a República Dominicana por el momento le queda un respiro de alivio

Hieren de bala dos comerciantes dominicanos en Haití






Puerto Príncipe.- Dos comerciantes dominicanos fueron gravemente heridos de bala en esta ciudad, cuando distribuían ayuda humanitaria a las víctimas del terremoto ocurrido en Haití el martes. Carlos Gatas y Milton Matos padre, oriundos de San Juan de la Maguana, se presentaron al local de la embajada dominicana en esta ciudad con heridas de escopeta e informaron que fueron asaltados.


Uno de ellos fue gravemente herido por lo que tuvo que ser trasladado en helicóptero hacia Barahona, y el otro, con heridas más leves, fue llevado a uno de los centros médicos que tiene la Minustah en este país.


Los organismos dominicanos que tienen a cargo la entrega de ayuda a las víctimas del terremoto, han visto dificultades para realizar sus labores. Durante el día de ayer y hoy haitianos han intentado asaltar los camiones del Plan Social de la presidencia dominicana, que entregan alimentos en ese país

Encuentran con vida bajo los escombros a propietaria del Hotel Montana en Haití


Los rescatistas continúan buscando entre los escombros otros sobrevivientes del sismo.
Puerto Príncipe.- Luego de cuatro días bajo los escombros, fue rescatada con vida la propietaria del Hotel Montana de Haití, quien se encontraba en el primer piso, el único que no colapsó tras el sismo del pasado martes. La dueña del hotel, de nacionalidad haitiana, fue encontrada pasadas las 7:00 de la noche desmejorada por la deshidratación y trasladada a un centro de atención médica de

Sigue con vida socorrista dominicano herido en Haití: lo están operando en el hospital de la FAD

A pesar de que familiares del señor Carlos Gatás, uno de los socorristas dominicanos heridos en Puerto Príncipe, Haití, confirmaron a Z101digital.com que éste había fallecido en Barahona mientras recibía atenciones médicas, otros familiares aseguraron que aún vive y que en estos momentos está siendo intervenido quirúrgicamente en el Hospital Ramón de Lara, de la Fuerza Aérea Dominicana, en Santo Domingo.

Gatas fue herido junto a otro socorrista, Milton Matos padre, cuando una turba de haitianos fue enfrentada por la policía en el momento en que intentaban asaltar un centro de acopio en las inmediaciones de una zona industrial de Puerto Príncipe.

Gatas fue herido de un balazo de escopeta en el pecho y fue trasladado en estado grave a Barahona, República Dominicana, por las fuerzas militares de las Naciones Unidas. De Barahona fue trasladado al hospital de la FAD.

Junto a él se encuentran dos de sus hijos, mientras que los mismos familaires que llamaron para confirmar su muerte se han comunicado con la Z101.3 para rectificar la información.

El otro herido es Milton Matos padre, comerciante de la provincia de San Juan de la Maguna, en la región sur del país. Nazar recibe atenciones en un hospital de la ONU capital haitiana.

Los dominicanos se encontraban en Puerto Príncipe brindando auxilio a los miles de haitianos afectados por el terremoto del pasado martes 12 cuando se encontraron en medio de un intento de asalto a la Sociedad Nacional de Zona Franca Haitiana, la cual sirve de centro de acopio de ayuda internacional y es custodiadas por los cascos azules de las Naciones Unidas.

Aparentemente los socorristas dominicanos se encontraron en medio del fuego cruzado entre la miembros de la policía de Haití y una turba de haitianos que desesperados querían asaltar el centro de acopio en busca de alimentos ante la falta de logística y organización para distribuir la ayuda.

El centro de acopio está ubicado en las inmediaciones de dos de los barrios más populosos de Puerto Príncipe: Cite Soleil y Dowllard, en los cuales habitan más de un millón de personas en condiciones de extrema pobreza y que fueron duramente golpeados por el sismo.

Este sábado, el jefe de la Policía de Puerto Píncipe, Mario Andresol, dijo que la situación se hace cada hora más incontrolable debido a la desesperación que vive la población

Planean evacuaciones masivas para evitar haya un brote de epidemias

PUERTO PRÍNCIPE, (EFE).- El Gobierno haitiano prepara planes de desplazamiento masivo de los damnificados por el terremoto del pasado martes, que se calculan en 600.000 personas, según dijeron a Efe este sábado fuentes oficiales.

"En muchos casos vamos a tener que proceder al desplazamiento de la población, y planeamos construir campamentos provisionales para recibir a las víctimas" para evitar las epidemias, dijo el ministro del Interior, Antoine Bien-Aimé.

Según el ministro, la Organización Internacional de Migraciones (OIM) ha entregado una gran cantidad de carpas para los damnificados, pero el Gobierno aún no ha comenzado a distribuirlas "pues estudiamos si es mejor darles las tiendas o desplazarlos masivamente", dijo.

El ministro de Sanidad, Alex Larsen, confirmó a Efe las últimas cifras disponibles de víctimas: algo más de 25.000 cadáveres ya encontrados y enterrados, y un cálculo de "70.000 muertos o más solo en Puerto Príncipe", sin contar los del resto del país, mientras que el número de heridos "es imposible de contar".

Su colega de Interior aseguró que en todo el país debe haber alrededor de cien mil muertos.
Los cadáveres son, por el momento, depositados en fosas comunes y tratados con cal viva, antes de cubrirlos con tierra, pero el ministro no descartó que tengan que recurrir a quemas masivas de cadáveres. "Es algo que aún no hemos decidido", admitió Larsen.

Hallan cadáver de jefe y de otros dos miembros de misión de la ONU




NACIONES UNIDAS .-El cadáver del jefe de la misión de la ONU en Haití, Hedi Annabi, fue hallado entre los escombros de su cuartel general en Puerto Príncipe, que se derrumbó durante el terremoto, informó el organismo multinacional.


El secretario general Ban Ki-moon dijo que también se hallaron los cadáveres del segundo de Annabi, Luiz Carlos da Costa, y del jefe de policía interino Doug Coates.


El jefe de la ONU dijo en un comunicado el sábado que Annabi, un diplomático tunecino, era "un verdadero ciudadano del mundo" y "un ícono de las fuerzas de paz en el mundo".


El brasileño Da Costa era "una leyenda en las operaciones de paz de la ONU", dijo Ban.


Coates, de la Real Policía Montada canadiense era un efectivo de larga data de la comunidad internacional de las fuerzas del orden, añadió.




De AP

Fuera de la capital haitiana, mucha desesperación y poca ayuda


LEOGANE, Haití.-Mientras se acumulan alimentos y agua en la capital de Haití, se acaba el tiempo en zonas rurales del país, donde los daños provocados por el terremoto del martes no fueron menos graves.



En Leogane, hombres furiosos, provistos de machetes y garrotes, se congregaban para luchar por una población que, dicen, el mundo ha olvidado en su premura por ayudar a la capital.


A lo largo de la carretera dañada que sale de Puerto Príncipe hacia el oeste, la gente implora ayuda. "SOS", dice un cartel cerca de Leogane. "No comprendemos por qué todo va a Puerto Príncipe, porque Leogane también fue quebrada".


Eso no expresa ni de lejos la realidad.


El centro de Leogane es una montaña de escombros y cables eléctricos, la costa de Haití convertida en un plató de cine postapocalíptico. Dos fosas comunes bordean el camino a la capital y unos cuantos cadáveres empiezan a ocupar una tercera.


En la esquina de Rue La Croix y Pere Thevenot, una bella construcción de 1922 que alojaba una farmacia y una florería es ahora un sepulcro de ladrillos para una pareja que no pudo escapar.


A pocas cuadras, un grupo de hombres se ha congregado para defender una clínica convertida en refugio contra todos los que pretenden atacarla: funcionarios que quieren cavar ahí otra fosa común, criminales escapados de la penitenciaría, saqueadores hambrientos.


Dicen que no quieren violencia, pero portan machetes, típico de esta ciudad de la zona azucarera y palos de madera.


"No hay nadie en la comisaría. No hemos visto ayuda", dijo Philip Pierre, de 28 años, gerente de una fábrica de yogur. "Estamos dispuestos a morir peleando si no nos escuchan".


La muerte hizo su agosto en este pueblo, donde bandas de Carnaval empezaban a ensayar cuando se produjo el terremoto del martes, con su epicentro 25 kilómetros (12 millas) al este.


El hedor que emana de los escombros es intenso y uno de los reclamos locales es que manden "palas grandes" de la capital para desenterrar los cuerpos.


Con espíritu solidario, el fabricante de ataúdes Yvon Lochard redujo sus precios de 450 a 100 dólares por cajón de madera.


"Antes, la venta era escasa", dice en tono práctico. "Ahora se venden rápidamente".


Sin embargo, a pesar de la rebaja, los precios son excesivos para un país donde la mitad de la población vive con un dólar diario. Llevan los cuerpos sobre láminas de hojalata y los arrojan a las fosas comunes.


Entretanto, los vivos tratan de seguir así. Hay alimentos en los mercados, pero un saco de arroz de 25 kilos (50 libras) cuesta 27,50 dólares, 25% más que antes del sismo. Las cisternas en los montes que rodean la ciudad se quebraron y muchos carecen de agua potable.


Un local de abarrotes en una esquina tenía arroz, pastas y otros alimentos por valor de 6.000 dólares, pero su dueño dijo que tenía más miedo a los derrumbes que a la ira de sus vecinos.


Efectivos de paz de Sri Lanka entregaban agua un millar de personas y compartían sus propias raciones, dijo el mayor Chandima Beligasooabba. Se les dijo que la ONU entregaría provisiones en las próximas horas.




De AP

Senegal ofrece tierras a haitianos damnificados




DAKAR, Senegal.- Senegal está listo para ofrecerles tierras a aquellos haitianos que deseen "regresar a sus orígenes", afirmó el sábado un vocero del presidente Abdoulaye Wade.


El presidente senegalés, dijo su portavoz Mamadou Bamba Ndiaye, desea darle una región de su país a aquellos haitianos que padecieron un terremoto devastador.


Haití fue fundado por esclavos africanos, incluyendo algunos que se cree provinieron de Senegal.


Wade dijo que si los haitianos deciden venir en masa les entregará una región del país, pues Africa es su "'tierra natal".


Ndiaye enfatizó que el presidente aclaró que la región que se entregue será una fecunda, ninguna en los resecados desiertos de Senegal.




De AP

"Carrera contra el tiempo" para distribuir comida y agua en Haití


PUERTO PRINCIPE.- Sobrevivientes hambrientos y harapientos del terremoto en Haití clamaban el sábado por alimentos y agua, mientras los donantes internacionales se esforzaban por determinar cómo enviar ayuda y los rescatistas libraban una carrera contra el reloj para liberar a los atrapados entre los escombros.

El gobierno de Haití por sí solo ya ha recuperado 20.000 cuerpos, sin contar aquéllos recuperados por sus familiares o los organismos independientes, dijo el primer ministro haitiano Jean-Max Bellerive a The Associated Press. Dijo que un saldo final de 100.000 muertos "parecería ser lo mínimo".

Bellerive dijo que unas 300.000 personas están viviendo en las calles de Puerto Príncipe y que "darles agua, alimentos y refugio es nuestra primera prioridad".

Había señales crecientes de que la ayuda extranjera y los rescatistas estaban llegando hasta las personas más necesitadas _ incluso los sobrevivientes aún sepultados bajo toneladas de escombros _ mientras otros se esforzaban todavía por resolver el problema sanitario que representan innumerables cuerpos abandonados en las calles.

Grupos numerosos de haitianos se agolpaban en torno de los trabajadores extranjeros que removían pilas de escombros de los edificios derrumbados con la ayuda de perros entrenados y en algunos casos palas mecánicas.

Los rescatistas introdujeron una cámara desplegable en un orificio en el derribado Hotel Montana y divisaron a tres personas con vida y escucharon la voz de una mujer que hablaba en francés, dijo David Betancourt, un trabajador ecuatoriano de la Cruz Roja

Gritos de dolor se confunden en hospital de Jimaní; cientos de pacientes siguen llegando

Muchos de los pacientes son referidos de los ocho hospitales móviles que tiene instalada la República Dominicana en la misma capital de Haití.

Jimaní.- Cada pasillo, cada rincón y cada espacio que conforma el Hospital General Melenciano de esta provincia está ocupado por pacientes heridos que son trasladados desde Haití tras el terremoto que afectó a esa ciudad el pasado martes, mientras cientos siguen llegando, sobre todo aquellos que están siendo rescatados con vidas bajo los escombros y que presentan serias heridas.

El grito de dolor de parte de los pacientes, la desesperación de familiares y el afán de médicos, enfermeras, miembros de la Defensa Civil y otro personal que e encuentra en este centro dando asistencia, convierte a este hospital provincial en un especio de hormiguero humano.

Muchos de los pacientes son referidos de los ocho hospitales móviles que tiene instalada la República Dominicana en la misma capital de Haití.

De ese hospital son referidos a su vez a hospitales de Barahona y otras zonas cercanas y a la Capital, mientras otros centros de salud de la región ya están desbordados.

En la mañana de hoy la primera dama de la República, Margarita Cedeño de Fernández, y el secretario de Salud Pública, Bautista Rojas Gómez, visitaron el centro para observar las condiciones, donde éste último dio órdenes y trazó estrategia de acción.

Aquí trabajan médicos del hospital Darío Contreras, cirujanos plásticos, anestesiólogos, y enfermeras, que se han unido a ayudar.

Los médicos dicen que el idioma no ha sido obstáculo para trabajar, ya que cientos de dominicanos y haitianos que hablan creol se han ofrecido como intérpretes.

La mayoría de los pacientes llegan con traumas en el abdomen y otras partes del cuerpo, infecciones, heridas abiertas, entre otras

La tendencia, según los médicos que laboran aquí, es que siga incrementándose la llegada de pacientes. Muchos de los galenos informaron llevan varios días sin dormir dando asistencia sin descanso.

El director de Emergencia y Desastre de Salud Pública, Juan Rodríguez, dijo que en las próximas horas empezarán a habilitar carpas para referir allí a pacientes que ya han sido atendidos para habilitar el espacio para los que lleguen.

En el hospital hay un equipo de rayos equis portátil donde en el mismo lugar que esté el paciente se le hace la radiografía.

Hay dificultades en Haití por la cerrada del espacio aéreo a la espera de la visita de la Secretaria de Estado norteamericana, Hillary Clinton, quien llegará al país hoy para supervisar los daños causados por el terremoto.

Entre shock y desaliento, haitianos viven la muerte

PUERTO PRINCIPE.- Las horas pasan lentas en Haití luego que el martes 12 de este enero un azaroso sismo de 7.3 grados en la escala Richter devastara en apenas un minuto la ciudad de Puerto Príncipe y gran parte del país más pobre de la región. Ya muchos de ellos se han resignado a que aquellos que quedaron bajo los escombros están muertos o no podrán ser rescatados: hasta el momento de escribir estas líneas era evidente la falta de una dirección, una estrategia, una logística, y mucho menos equipos de rescate y combustible.

Una calle de Puerto Príncipe se ha convertido en el "almacén" de cientos de cadáveres en estado de descomposición.

¿Cómo lo deben haber sabido los más de cien niños y el personal médico y administrativo del Nos Petits Freres et Soeurs (un hospital infantil dirigido por médicos extranjeros), ubicado en Petion Ville, el exclusivo sector de Puerto Príncipe?. Quedaron sepultados bajo los escombros y a pesar de que llegó una grúa a hacer labores de rescate, tuvo que ser detenida por falta de combustible, luciendo vencida ante tanta mole, como los socorristas cubanos que llegaron el mismo martes en la noche y no pudieron hacer nada por falta de equipos de rescate ligeros y pesados. Y es que en Haití no hay de nada, ya lo sabíamos, pero no se había constatado en medio de la desgracia.

Pero hay que seguir adelante, el pueblo haitiano siempre ha sacado fuerzas de donde no hay, al punto que una señora regordeta ya puso un puesto de comida a cinco metros de lo que antes fue el hospital infantil y de los cuerpos que aún yacen allí. Si aún se escucharan los gritos de los niños y los adultos pidiendo ayuda, de seguro hubiese buscado otra esquina, pero las voces se agotan y los ojos se cierran con el paso de las horas.

Alana (derecha), con un edema en el rostro producto de los golpes recibidos en el terremoto, pasa el rato cerca de una amiga y su hermano Koki.

Otros caminan como hormigas, en fila y apurados, por una calle paralela a un cul de sac con cientos de cadáveres putrefactos apilados uno sobre otro, a sol y sereno. El hedor se extiende por toda la ciudad, es un solo olor a muerte de pobre; pobre tan pobre, que aún en la desgracia no tiene el derecho de descansar en una fosa, aunque sea compartida. Se habla de 100 mil muertos, pero es imposible establecer el número de fallecidos, en especial, después de pasadas las 72 horas del evento telúrico, cuando las posibilidades de sobrevivencia de los atrapados en los escombros se reduce de manera considerable.

El deterioro de las vías de comunicación terrestres y los escombros en las calles impiden que la ayuda llegue a Puerto Príncipe y sus barrios, especialmente Carrefur, Jacmel y Petionville, los más afectados por el terremoto, el más fuerte en la historia de la región caribeña. La gente en la capital haitiana no ha recibido la primera botella de agua, ni la primera ración de pan, mucho menos la mano amiga de un médico y sus pócimas curativas.

A un niño de 10 años se le pudren los pies en un refugio improvisado en las inmediaciones de la embajada dominicana. Se llama Koki y sufrió fracturas en ambas piernas, no puede caminar, mientras su hermana Alana, de 6 años, trata de cubrirse del sol una sábana; ella sufrió golpes en el rostro. Y él y ella, como los demás niños en ese campamento, entretienen el hambre oliendo hierbabuena.

Haití prácticamente no tiene gobierno, el Presidente Préval no tiene casa ni despacho, el Congreso también colapsó, salvándose el presidente de esa entidad de casualidad -los dos congresistas a su lado perecieron-, tampoco hay autoridad religiosa, el nuevo encargado de la Minustah (ONU), aunque está empeñado en las labores de rescate, tiene a su esposa bajo los escombros del Hotel Montana. No hay piedra sobre piedra en Haití, ni siquiera cuando se trata de sentimientos.

La entereza humana y determinación de este oficial se hizo más que evidente cuando le dijo a militares y rescatistas dominicanos que a pesar de que su compañera está sepultada bajo las toneladas de escombros del hotel Montana, hay zonas más devatadas y que por el tipo de infraestructura hay más posibilidades de encontrar sobrevivientes. "La acción debe concentrarse en esos lugares" dijo.

El buque hospital Comfort que ofreció Estados Unidos todavía no había llegado el viernes a las 2:00 de la tarde. Llevar la ayuda por el mar podría salvar la situación que se ha presentado con la caída de la torre de control del Aeropuerto Toussaint Louverture, aunque es un medio de transporte más lento, pero es –tal vez- el que más podría acercarse a la zona afectada.

Los haitianos están en las calles, caminan para arriba y para abajo, sin rumbo, otros huyendo. Unos esperando no saben bien ni qué ¿Qué harán ahora? Algunos que tienen familia en el campo piensan irse con ellos, pero lo más pobre de Haití es el campo: no hay tierra fértil, no hay agua ni crédito para la agricultura. República Dominicana se avizora en el horizonte como la única tabla salvadora.

Los campamentos improvisados por los que quedaron sin hogar semejan un día de mercado de purga.

La Organización Internacional de las Migraciones estimó que se elevó en un 10% el número de personas que intentan cruzar la frontera con República Dominicana. Algunos ya están en la frontera desde el miércoles, buscando refugio a lo que viene: la epidemia.

Ni los propios haitianos se atreven a respirar su propio aire sin cubrirse la nariz. Los muertos, los que no están bajo los escombros, están amontonados; a la orilla de la carretera y hasta han sido utilizados para hacer barricadas, en protesta por la lentitud con que se ha manejado la ayuda internacional. El hedor es insoportable. Otros han sido enterrados en fosas comunes o en una tumba improvisada en cualquier esquina, sin ningún tipo de registro ni de cuidado sanitario, sin siquiera cal. Los médicos dominicanos vaticinan una epidemia y hasta SergioSarita Valdez, patólogo y ex director del Instituto Nacional de Patología Forense, recomendó que los cadáveres fueran incinerados para evitar contagios. Nada se ha hecho, no hay dirección en Haití.

La inseguridad crece por tanta necesidad, por tanto trauma

Una niña con aparente trastornos mentales, pide agua, el padre no tiene nada que darle.

Algunos funcionarios van a ayudar armados, también algunos periodistas. Una se pregunta ¿cómo ayudar a alguien que crees que te va a agredir? ¿Cómo puede un ser tan golpeado como el haitiano y la haitiana hacerte daño? Pero todo es posible, la seguridad no está garantizada ni siquiera para el presidente Préval, que no sale del área del aeropuerto, porque no hay presencia militar ni policial. La mayoría de los funcionarios murieron o están heridos. En la calle no hay quién ponga el orden. El dolor, el hambre y la sed pueden hacer perder la cabeza al más juicioso. Además, todo se ha disparado de precio, un jugo –si aparece- cuesta 10 dólares, un galón de gasolina –si parece- 500 pesos. Un reloj caro, una cámara fotográfica o una lap top serían oro ante el agravamiento del hambre, la sed y de las secuelas del evento.

También se prevén desórdenes al momento que la ayuda llegue a las zonas afectadas, y no se descartan conatos de violencia. Tal vez a eso le temen los organismos internacionales y por ello se han dilatado en entregar la ayuda, pues no hay ningún tipo de seguridad para sus voluntarios. El asalto al almacén del Programa Mundial de Alimentos (PMA) así lo demuestra. La guerra por el agua está a punto de comenzar y será en Puerto Príncipe, donde todos los servicios colapsaron, entre ellos los vitales: agua, energía y comunicaciones.

La única grúa que fue a socorrer al hospital infantil, terminó vencida ante tantos escombros y por la falta de combustible.

El trauma psicológico ya está instalado. Es que se le cayó el mundo a los haitianos no solo el palacio de gobierno, el edificio de la ONU y la iglesia Santa Teresa, es que todo se fue abajo, especialmente porque estaba construido en laderas de tierras arcillosas, sin suficiente varilla y cemento. Los haitianos saben de construcción, por la experiencia que han adquirido en el campo de la construcción en RD, pero no son ricos para comprar el cemento a RD$270 y la varilla a RD$1,350, sin contar el transporte hasta allá y el mercado negro. Puerto Príncipe, la perla de Haití, ya no existe, hay que reconstruirla, comenzar de cero.

Ahora la preocupación del empresariado y parte de la opinión pública del país es la posibilidad de que al reconstruirse Puerto Príncipe, muchos haitianos decidan regresar por un tiempo a su tierra a trabajar y a aportar por la recuperación de su gente. La mezquindad no se amilana ni ante la tragedia humana y sale por cualquier grieta. Hay que ver cómo está Haití para entender que lo necesita todo, aunque nos quedemos sin nada.

RD muestra su mejor cara: la solidaridad



SANTO DOMINGO. La solidaridad de los dominicanos se ha dejado sentir nuevamente con el pueblo haitiano.


Las secuelas del terremoto que devastó a Puerto Príncipe, la capital del estado haitiano movilizó acciones para recabar ayuda para los damnificados.


Este fin de semana la mayoría de los artistas han aplazado sus compromisos. El país está en duelo ante la tragedia de los vecinos haitianos. Este sábado y domingo, se desarrollarán una intensa jornada en la televisión para procurar la colaboración de los dominicanos y de extranjeros.


"Sábado de Corporán", el programa que produce Rafael Corporán de los Santos por Color Visión hará lo suyo. Invitará a la población a colaborar. Entre Tita Hasbún, productora de Fashion TV se integrará al telemaratón de Corporán.


Mientras que Jochy Santos, quien emite "Divertido con Jochy" desde Telesistema tiene la jornada "Solidaridad y oración por Haití".


Allí motivarán a los televidentes a llevar sus donaciones a las instalaciones del canal. Esta transmisión incluirá la cobertura noticiosa desde Haití a cargo del periodista Roberto Cavada.


En directo


Noticias SIN, el grupo que preside Fernando Hasbún, se convirtió ayer en el primer canal en hacer una transmisión vía satélite desde territorio haitiano. Para este sábado y durante todo el fin de semana continuarán llevando las informaciones.


Una amplia jornada


Los modelos también ayudarán y desde hoy harán una actividad para recaudar fondos en las principales avenidas de la ciudad. Las donaciones serán utilizadas para la adquisición de comida, medicinas.


Tendrán un centro de acopio en el parque de la Lira, entre las avenidas Abraham Lincoln y Lope de Vega desde las 9 de la mañana de hoy.


En la noche, Myrna Pichardo y Nuria Piera con sus respectivos programas por Color Visión mostrarán coberturas especiales.


Hoy El Jeffrey está saliendo a Haití para llevar su solidaridad.


El domingo, el Telemaratón


Este domingo 17, la Conferencia del Episcopado Dominicano, en la presencia de Monseñor Nicolás Cardenal López Rodríguez, realizará un telemaratón que tendrá como canal matriz a Color Visión.


Comenzará a la mediodía del domingo y cerrará a las 12 de la medianoche.


"Hemos logrado integrar a 12 canales de televisión y contaremos con la presencia de unos 38 artistas", comentó Jatnna.


Durante la transmisión, presentadores de televisión, animadores radiales y productores artísticos estarán atendiendo las treinta líneas telefónicas que han sido habilitadas para recibir las contribuciones.


Entre otros, tendrán participación en el telemaratón Eddy Herrera, Rubby Pérez, Tulile, Ilegales, Los Rosario, Pavel Núñez, Amaury Sánchez, Héctor Acosta, Rita Indiana, Marel Alemany, Kinito Méndez, Toño Rosario y Ramón Orlando.


Jatnna ha confirmado la presencia de reconocidos animadores quienes asumirán segmentos de la producción.


En la noche del domingo, Tania Báez contará su experiencia y mostrará la cobertura que hizo en su visita a Haití.


Cultura también está presente


La Secretaría de Estado de Cultura abrió un centro de acopio en su departamento de Recursos Humanos.


Su titular José Rafael Lantigua, decidió posponer los actos inaugurales del Año de Santo Domingo Capital Americana de la Cultura para la primera semana de febrero, en solidaridad con el hermano país.


Un comunicado enviado por Cultura indica que desde las primeras horas de ayer se instaló en la sede de esa institución un centro de acopio, coordinado por las subsecretarias de Estado, Bernarda Jorge y Lourdes Camilo de Cuello.




De Severo Rivera

Un temblor de 4,5 grados vuelve a sembrar el pánico en Haití


Los haitianos asustados se alejaron corriendo de las construcciones tambaleantes


WASHINGTON.- Un temblor de magnitud 4,5 grados en la escala de Richter, réplica del devastador terremoto que asoló Haití el pasado martes, se registró hoy en el país caribeño, informó el Instituto geológico de Estados Unidos.


Una réplica del terremoto en Haití, una de las más fuertes que hayan sacudido Puerto Príncipe desde el martes, causó pánico en la capital el sábado.

Los haitianos asustados se alejaron corriendo de las construcciones tambaleantes por la réplica, complicando los esfuerzos de rescate.

"Este es el temblor más fuerte que hemos tenido desde el terremoto. Estamos asustados", afirmó Joseph Jean Albemar, un técnico en el atestado hotel Villa Creole, donde muchos huéspedes salieron corriendo de sus cuartos al ocurrir el temblor.

La administración del presidente Barack Obama, decidió otorgar el TPS (status de protección temporal), a los haitianos ilegales en territorio american


La administración del presidente Barack Obama, decidió otorgar el TPS (status de protección temporal), a los haitianos ilegales en territorio americano, y parar las deportaciones. La Secretaria de Seguridad Nacional, Janet Napolitano,dió a conocer la noticia este viernes en horas de la tarde. " Este es un mensaje de compasión para el pueblo de Haití y un reconocimiento de la devastación que su país ha sufrido". Manifestó la secretaria Napolitano. Leer Más

España repatría a sus primeros ciudadanos afectados por la tragedia en Haití


Santo Domingo, 15 ene (EFE).- Las autoridades españolas repatriaron hoy desde Haití a los primeros ciudadanos de este país tras la catástrofe causada por terremoto que hace tres días azotó la capital de la nación caribeña, Puerto Príncipe. Un grupo formado por 30 personas, 24 de ellos españoles, salió del aeropuerto Toussaint Louverture hacia las 20.00 hora local (1.00 GMT del sábado) con destino a la capital dominicana, Santo Domingo, desde donde todos ellos se dirigirán a España a continuación. Leer Más

Saqueadores armados siembran el terror en Haití

Hombres armados vigilan una estación de combustible en Puerto Príncipe (Haití)

PUERTO PRINCIPE.- La desesperación y la ira aumentaban en Haití, tras el sismo que destruyó Puerto Príncipe, donde saqueadores armados añadían más terror en sus calles mientras las autoridades criticaban problemas de "coordinación" para la distribución de ayuda humanitaria.

La muerte, presentada de la manera más cruda y despiadada, inundaba irremediablemente las calles de Puerto Príncipe, destruida por el temblor del martes de 7,0 que dejó un saldo parcial de más de 50.000 muertos.

Mientras funcionarios de las Naciones Unidas clamaban por más ayuda, los saqueos se propagaban y se registraban enfrentamientos en los puestos de distribución de ayuda.

"Hay hombres armados, muchos saqueos", dijo Eglide Victor, cuya precaria casa es la única que permanece en pie en toda la cuadra de una manzana en el corazón de Puerto Príncipe.

En el Mercado de Hierro, uno de los barrios más pobres de Puerto Príncipe, los habitantes buscaban frenéticamente en los edificios destruidos bienes para su supervivencia, ignorando a los cadáveres hacinados, abrasados por el sol.

Pero la irrupción en las últimas horas de los primeros contigentes extranjeros de ayuda lograba al menos cambiar el humor de algunos haitianos.

"La falta de electricidad es menos grave que el hambre, la sed y la falta de medicamentos, sobre todo algo para las infecciones. Estamos rodeados de muertos", explica Victor, una profesora de 26 años.

La inseguridad reinante y la falta de coordinación con las autoridades locales son las principales dificultades señaladas por las autoridades y los equipos de rescate.

El presidente de Haití, René Preval, destacó la respuesta internacional, pero se quejó de mala coordinación en la entrega de la ayuda que llega a diario desde el exterior.

"Necesitamos la ayuda internacional, pero el problema es la coordinación", declaró el mandatario en una entrevista con la AFP.

Preval destacó que 74 aviones que venían de varios países, entre ellos Estados Unidos, Francia o Venezuela, llegaron en un solo día al saturado aeropuerto de Puerto Príncipe.

"Lo que vamos a hacer (...) es pedirle a los donantes que trabajen con comités que establecimos en el seno del gobierno", indicó Preval, que estableció la sede temporal del gobierno en una comisaría próxima al aeropuerto internacional de Puerto Príncipe -bajo control de Estados Unidos-, debido a la destrucción de varios edificios públicos, incluido el palacio presidencial.

La ONU lanzó el viernes un llamado a la comunidad internacional para recolectar 560 millones de dólares con destino a las víctimas.

La Secretaria de Estado estadounidense Hillary Clinton indicó que viajará a Haití este sábado para observar la organización de la asistencia al país.

Unos 30 países, entre ellos Cuba, Venezuela, México Estados Unidos y Francia, participan en las operaciones de ayuda y están presentes en el país, según el Departamento de estado norteamericano, pero las dificultades son inmensas.

Una vanguardia de 10.000 tropas estadounidenses desplegadas en Haití tomó el control del aeropuerto, cargados con toneladas de reservas, y comenzaron la primera distribución masiva de ayuda.

La misión está concentrada en el rescate de vidas humanas pero las tropas norteamericanas podrían ser llamadas a mantener el orden si las condiciones de seguridad se llegan a deteriorar, según responsables en Washington.

Haití, una de las naciones más pobres del mundo, que hace tiempo vive inmersa en violencia y baños de sangre, no tiene ejército y sus fuerzas de policía casi han desaparecido en el caos que siguió al terremoto.

El mantenimiento del orden descansaba casi totalmente en la fuerza de la ONU: unos 7.000 soldados y 2.000 policías de Naciones Unidas desplegados desde 2004 para contribuir a la estabilización del país.

Tras el sismo, unos 6.000 presos huyeron de las cárceles de Haití, que quedaron parcialmente destruidas y sin vigilancia.

Los contigentes extranjeros tienen aún varios frentes que resolver. En una carrera contrarreloj, intentaban rescatar a las personas que pudieran estar vivas bajo los escombros.

Mientras tanto, varios cuerpos comenzaban a apilarse en una fosa común que las autoridades cavaron en un intento de limpiar las calles de cientos de cadáveres.

"Hemos perdido cualquier dignidad ante la muerte", afirma Mezen Dieu Justi, un anciano que apenas soporta las náuseas al pasar ante esta sórdida escena.

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"Enorme" caravana médica de Cruz Roja sale desde RD a Haití para dar asistencia






Ginebra.- Una caravana que transporta por tierra una "cantidad enorme" de materiales de asistencia para las víctimas del terremoto que devastó Puerto Príncipe salió desde la República Dominicana a Haití, dijo el sábado la Federación Internacional de la Cruz Roja.


Trabajadores de la Cruz Roja noruegos, finlandeses, españoles, daneses y japoneses partieron con un hospital de campaña de 50 camas, equipos para cirugía y una unidad de comunicaciones de emergencia, dijo el vocero Paul Conneally. Tardarían de seis a ocho horas en llegar a la capital haitiana, agregó.


Conneally le dijo a The Associated Press por teléfono desde Santo Domingo que la caravana va por tierra porque "no es posible mandar nada por aire a Puerto Príncipe en este momento, porque el aeropuerto está completamente congestionado".


La Federación, que representa las filiales nacionales de la Cruz Roja de todo el mundo, pronto aumentará su pedido de ayuda para Haití.

Telefónicas de RD colaboran con haitianos


SANTO DOMINGO. Un equipo de más de 20 técnicos del Indotel, conjuntamente con especialistas de las prestadoras Viva, Codetel, Orange, Tricom y operadoras haitianas, realizan intensos trabajos de recuperación de las telecomunicaciones en Haití, devastada por un terremoto que sembró muertes, dolor, desesperación e incertidumbre en la hermana nación.

El anuncio lo hizo esta tarde el presidente del Indotel, José Rafael Vargas, quien dijo que trabajan en la instalación de tres equipos Visat de telefonía fija, celulares satelitales y una red de Internet en la embajada dominicana para establecer vías de comunicación gratuita desde esa sede diplomática en la capital haitiana.


De Diario Libre

Más de 300 vuelos desde RD con ayuda humanitaria


AEROPUERTO LAS AMERICAS. Más de trescientos vuelos con ayuda humanitaria, delegaciones de médicos, policías, bomberos, unidades caninas y otros grupos de personas que ofrecerán respaldo logístico a los damnificados del terremoto en Haití, se han movilizado desde y hacia el exterior, por cuatro de los principales aeropuertos manejados por el consorcio Aerodom.

Yolanda Mañán, directora de Comunicación y Relaciones Públicas, explicó que los vuelos han sido por las terminales de Las Américas; Gregorio Luperón, de Puerto Plata; Isabela, de Santo Domingo Norte y María Montez, de Barahona.

Reveló que por el aeropuerto Las Américas, del 13 al 15 del cursante mes se han movilizado 102 vuelos relacionados con el sismo.

Señaló que las embajadas están trasladando a sus ciudadanos desde Haití hacia sus países de origen por el aeropuerto Las Américas, ante la difícil situación que prevalece en Haití.

Asesina a su hija recién nacida porque quería un varón

Un hombre de 25 años asesinó a su hija después de haber nacido porque su anhelo era tener un hijo varón, según denunció a la policía su esposa, publica hoy La Prensa.

La mujer, de nombre Cristina B., se presentó el viernes ante la policía de la ciudad de El Alto, vecina de La Paz, para denunciar a su esposo Fernando C.M., tras hallar el cuerpo de la bebé oculto en una bolsa bajo la cama de la habitación del hotel "El Alteño" donde vivían.

Según las primeras investigaciones, el asesino quería tener un hijo varón y después del nacimiento de la niña hace dos semanas se sentía frustrado y no podía dormir.

La mujer sorprendió a su marido saliendo de la habitación tras cometer el crimen y él le dijo, mientras lloraba, que sin la bebe vivirían felices.

Llevan heridos a jimaní en furgones y camiones



Ante la escasez de ambulancias, cientos de haitianos con heridas y traumas severos por el sismo del pasado martes son llevados al hospital General Melenciano, de la ciudad fronteriza de Jimaní en furgones, camionetas y minibuses donde esperan largas horas para ser atendidos. Un alto porcentaje se tiene que someter a amputaciones de miembros.


La desesperación no sólo se centra en los pacientes y familiares, sino en los mismos médicos y enfermeras quienes salen presurosos preguntando cuándo saldrá la próxima ambulancia a Barahona.


Y es que el hospital Jaime Mota de esta última ciudad es otro de los centros de la región Sur adonde se han llevado decenas de pacientes con problemas mayores, así como a Neyba, San Juan de la Maguana y Elías Piña.


El sub secretario de Salud Pública de la regional cuatro, doctor Rafael Chiffino, informó que el hospital de Jimaní tiene capacidad para 60 camas, pero ayer tenía 200 pacientes de cuidado.


Se han recibido más de 2,300 afectados por politraumatismos y otros males como fracturas en la cadera, cráneos, tibia y otros lugares. Se han atendido muchos niños con problemas agudos en el abdomen y apendicitis.


Las camas disponibles no dan abasto para la gran demanda, por lo que se están ubicando los enfermos en colchonetas en el piso y hasta en cartones y puertas.


Muchos pacientes son trasladados al Centro Nutricional y Formación San José de Jimaní y al centro Buen Samaritano de Misión Mundial (cerca del hospital), recién construidos y, sin inaugurar, se "estrenaron" ante la catástrofe.


Buscan presos


Miembros de inteligencia apostados en la frontera informaron a DL que están tras la pista de varios presos que escaparon tras el colapso de dos cárceles en Puerto Príncipe.


Entre los reos perseguidos figura un colombiano y un grupo que habría salido en una yipeta BMW X5. Se limitaron a reservarse nombres y detalles.


En esta semana otro colombiano y un iraní fueron detenidos tratando de cruzar la frontera.


Se reciben más de 700 personas cada día en Jimaní con fracturas en la cadera, cráneos, tibia y otros lugares.




De Diario Libre

Hillary Clinton llega hoy a Haití


PUERTO PRINCIPE.- Mientras la comida, el agua y otras formas de ayuda comenzaban a llegar a Haití en grandes cantidades, las organizaciones de asistencia y los funcionarios se concentraban en hacer llegar esas provisiones desde el atiborrado aeropuerto a los sobrevivientes hambrientos y demacrados que pululaban por las calles de la capital.

La secretaria de Estado estadounidense Hillary Rodham Clinton tenía planeado llegar a Puerto Príncipe el sábado para hablar con el presidente haitiano René Preval y funcionarios civiles y militares de varios países sobre cuál es la mejor manera de colaborar con las tareas de asistencia y con el gobierno local.

Clinton dijo el viernes que hay "una carrera contra el tiempo" antes de que la ansiedad y la furia de las víctimas generen problemas adicionales. Los socorristas advertían que Puerto Príncipe se sumirá en el caos si las provisiones no se reparten con rapidez.

El Comando Sur de Estados Unidos dijo que tiene 24 helicópteros en misiones de ayuda, muchos de los cuales parten de buques anclados frente a la costa, con 4.200 efectivos en el terreno y 6.300 más que arribarían el lunes.

Pero había escasas señales de ayuda en la ciudad cuatro días después del sismo, y muchas señales de que los desesperados y los delincuentes estaban tomando la delantera.

Un conductor de un camión de agua dijo que fue atacado en uno de los barrios precarios de la ciudad. También había informes de saqueos aislados, con jóvenes que caminaban por el centro con machetes. Un grupo de ladrones presuntamente mató de un disparo a un hombre que quedó tirado en la calle.

Equipos médicos extranjeros armaron hospitales improvisados para atender a los heridos más graves. Sin embargo, el tiempo se acababa para la gente que puede estar atrapada bajo los escombros.


De AP

La ONU califica de catástrofe histórica la situación en Haití tras el sismo


Ginebra, 16 ene (EFE).- El terremoto que ha devastado la capital de Haití, Puerto Príncipe, y otras ciudades del país caribeño es una catástrofe histórica y la peor situación a la que ha debido hacer frente la ONU, señaló hoy una fuente de la organización. Elizabeth Byrs, portavoz de la oficina humanitaria de la ONU, OCHA, dijo a Efe que "nunca hemos tenido que hace frente a circunstancias similares. Nos encontramos con un país decapitado, sin estructuras políticas o gubernamentales en las que apoyarnos" para llevar a cabo las labores de ayuda y rescate. Leer Más

Más del 80% de heridos que está llegando a Neyba y Jimaní requiere amputación

Ha requerido amputación de extremidades más del 80% de los pacientes procedentes de Puerto Príncipe que han sido atendidos en los hospitales de Jimaní y Neyba entre el jueves y viernes de esta semana, deacuerdo al médico cirujano, José Pérez Vidal, miembro del equipo médico del Hospital Darío Contreras apostado en el Hospital General Melenciano, en Jimaní.

“En el día de ayer (jueves) hubo un caso que nos partió el alma, de una niña de dos años que tuvimos que amputar, que estaba aplastada y fue sacada y el miembro inferior de su pie derecho hubo que amputárselo porque estaba necrótico. La situación es una situación bastante triste”, dijo el médico a un equipo de la Z101 dirigido por Bienvenido y Willie Rodríguez que visitó Puerto Príncipe y Jimaní.

El Hospital Darío Contreras envió a su homólogo en Jimaní un equipo de diez especialistas compuesto por cirujanos, ortopedas, anestesiólogos y ahora se le sumará un cirujano maxilofacial que está siendo requerido en la zona. Pérez Vidal dijo que en los tres días que llevan en la zona no han podido dormir por el exceso de trabajo.

La capacidad del hospital de Jimaní es de apenas 35 camas, por lo que el hospital de Neyba se ha sumado a la labor humanitaria de brindar asistencia médica a los heridos que llegan desde Haití, en donde el pasado martes 12 de enero a las 5:53 de la tarde un sismo de 7.3 grados en la escala de Richter prácticamente barrió con Petion Ville, la capital haitiana.

Las autoridades de Salud Pública han decidido sumar a este esfuerzo los hospitales de Azua, Barahona y San Juan de la Maguana, dado que la cantidad de heridos que llegan desde Haití ha desbordado la capacidad del hospital, y aunque un 30% de los “internos” (acostados y parados en pasillos y rincones) ya está para ser dado de alta, no tienen cómo ni para dónde mandarlos, además de que muchos requieren seguir un tratamiento médico.

En momentos que el equipo de la Z101 se encontraba en la 19 Compañía del Ejército Nacional en Jimaní, donde se encuentra el centro de comando de la Defensa Civil en la zona, el doctor Pérez Vidal y el General Luis Luna Paulino estaban reunidos para determinar qué hacer con estos pacientes, que necesitan atención, pero no tan apremiante como los pacientes de nuevo ingreso.

La solución será crear unos campamentos próximo a la 19 Compañía del Ejército Nacional en donde estos pacientes continuarán recibiendo asistencia médica hasta tanto puedan regresar a su país.

Los Comedores Económicos del Estado también está en el lugar proveyendo de alimentación a socorristas, personal militar y ciudadanos haitianos, sanos y enfermos, que llegan allí buscando auxilio. Diariamente, unas cocinas ambulantes preparan unas 100 mil raciones alimenticias, que si bien no solucionan el problema, al menos contribuyen a mantener en pie a las personas que organizan la ayuda al país vecino.

Chávez decreta aumento salarial

BBC Mundo, Venezuela

Hugo Chávez, presidente de Venezuela, en la Asamblea Legislativas

Chávez reconoció que se equivocó con los apagones en Caracas.

El presidente de Venezuela, Hugo Chávez, decretó este viernes un aumento del salario mínimo del 25% que se hará efectivo en dos etapas: 10% el 1 de marzo y 15% el 1 de septiembre.

El anuncio lo efectuó en el marco de la presentación de su memoria y cuenta del año 2009 ante la Asamblea Nacional, en la que aseguró que esto es posible “gracias al ajuste cambiario” que entró en vigor esta semana y que “continuará disminuyendo la pobreza y elevando el ingreso de los sectores que quedaron excluidos”

El mandatario reiteró que la devaluación del bolívar en dos bandas: a 2,60 por dólar para productos de primera necesidad y a 4,30 para el resto, fue una estrategia para estimular la producción nacional y las exportaciones, y que en ese sentido representará un beneficio innegable para la economía venezolana.

clic Lea: Venezolanos enfrentan devaluación

Además se pronunció por expropiar los comercios de los especuladores que aumenten los precios, un efecto que, ratificó, no tiene por qué ocurrir.

La devaluación, junto con el racionamiento de electricidad, representó un comienzo de año noticioso para los venezolanos, muchos de los cuales expresaron rechazo a través de protestas y opiniones en los medios de comunicación. Algunos críticos venían especulando desde hace un par de días con la posibilidad de que se produjera algún tipo de medida compensatoria para paliar el efecto.

Tradicionalmente, en Venezuela los aumentos de salario mínimo están ligados a la celebración del día del Trabajador, el 1 de mayo.

Nuevos números y ministros

El salario mínimo pasará de 967,50 bolívares (unos US$274 al cambio promedio ponderado de 3,53 bolívares por dólar) a 1.209,37 bolívares (unos US$342). Con la tasa de 2,15 bolívares por dólar anterior a la devaluación, el salario original (sin el reciente aumento) equivalía a unos US$450.

El presidente también informó de cambios en el gabinete ministerial: el hasta ahora titular de Finanzas, Alí Rodríguez, pasará a ocupar la cartera de Energía Eléctrica. El ministro de Planificación se ocupará ahora también de Finanzas.

clic Lea también: El bolívar fuerte cae a la lona

En cuanto a la crisis eléctrica, el presidente admitió este miércoles que hubo errores en el manejo por parte del gobierno, aunque insistió en que “la única y sola causa” del racionamiento impuesto esta semana -- y suspendido en menos de 24 horas en Caracas – era el hecho de que no hubiera llovido lo suficiente para mantener los niveles del embalse de Guri, del que se alimenta la principal central hidroeléctrica del país.

Que ha habido algunos retardos en algunas obras, es verdad, que hubo un manejo ineficiente en algunos espacios, es verdad pero la causa única del racionamiento eléctrico es la sequía

Hugo Chávez, presidente de Venezuela

“Que ha habido algunos retardos en algunas obras, es verdad, que hubo un manejo ineficiente en algunos espacios, es verdad pero la causa única del racionamiento eléctrico es la sequía”, dijo Chávez en el marco de su rendición anual de cuentas ante la Asamblea Nacional.

Las autoridades vienen sosteniendo que es necesario efectuar cortes drásticos en el consumo de energía, so pena de someter al país a un apagón general en pocos meses. Sin embargo, un plan implementado esta semana con poca información generó confusión y rechazo entre los venezolanos.

Críticos siguen insistiendo en que el verdadero origen de la crisis es la falta de inversiones y planificación por parte del gobierno, que debió haber ejecutado obras hace años para disminuir la dependencia de Guri.

Comunicación falló

El mandatario venezolano señaló que hubo también errores comunicacionales, porque no se informó debidamente a la población y dijo que no debió dejarse la materia a los técnicos.

Además aseguró que había grupos que querían crear el pánico aprovechándose de la situación, pero advirtió que quienes se frotaban las manos esperando un caos eléctrico se iban “a quedar con las ganas”.

clic Chávez suspende apagones en Caracas

En todo caso, pidió paciencia a la población, porque el problema de suministro persiste y habrá que aplicar alguna clase de restricción si se quiere evitar un colapso de grandes proporciones.

También se refirió a la inseguridad personal, el que aparece en las encuestas como el principal problema que aqueja a los venezolanos. Chávez apuntó a una especie de componenda como causa última del alto índice de robos y asesinatos que se registran semana tras semana en las principales ciudades del país.

“No tengo duda que muchas de esas bandas criminales son preparadas, financiadas, apoyadas por la burguesía y nuestros enemigos internacionales, el imperio yanqui y sus lacayos”, dijo.

Pandillas toman control de calles de Haiti; riesgo de revuelta social por hambre








Fuente: ElUniversal.com

PUERTO PRÍNCIPE.— El demoledor golpe que propinó el sismo de 7.3 grados a la empobrecida Haití representa, cuatro días después, sólo la punta del iceberg de una tragedia de proporciones incalculables: la inminente emergencia sanitaria, el caos, la falta de gobierno, el hambre y la desesperanza alimentan una violenta revuelta social, cuyos primeros síntomas ya dominan las calles de esta capital.



Los saqueos, los enfrentamientos entre ciudadanos por alimentos o por la protección de las pocas posesiones que aún conservan algunos, se suman a la aparición de pandillas que recorren las calles en actitud de rapiña.


En Puerto Príncipe, la ciudad más poblada de La Española, la más pobre y marginada, el hedor que despiden cientos, miles de cuerpos en descomposición, domina cada esquina, cada cuadra, lo que parece ya no importar a nadie, en contraste con la falta de alimentos que genera irritación en la gente.


Los gritos y los insultos mutuos se incrementan conforme avanzan las horas. En esta capital se aviva un polvorín que está a punto de estallar.


Una pequeña botella de agua cuesta más de un dólar, pero hay paquetes con seis botellas de un litro y medio que se cotizan en 30 dólares.


El desabasto se recrudeció. No hay nada y se prevén mayores actos de saqueo y violencia a los ya registrados, cuando la ayuda humanitaria fluya. La población ya está desesperada.


En algunos puntos de la ciudad especialistas procedentes de Bélgica son quienes se encuentran más activos, y junto a ellos los de República Dominicana, Costa Rica y Bolivia. Distribuyen alimentos sólo a unos cuantos. La mayoría no alcanza nada. Las filas para recibir comida comienzan a crecer.


En Puerto Príncipe ya se vive una virtual emergencia sanitaria; la muerte es parte de un escenario que cobra tintes macabros. El Hospital General se encuentra atiborrado, y no sólo de heridos, que ya se cuentan por miles, sino de cadáveres que son apilados por decenas en los patios del nosocomio.


Hoy Haití no tiene autoridad y de su presidente, René Préval, no se sabe nada. El único funcionario público que apareció ayer fue el ministro de Salud, Alex Larsen, quien calculó en 50 mil los muertos y en 250 mil los heridos








Fuente: ElUniversal.com















Ante la lentitud en la distribución de ayuda, algunos haitianos han optado por buscar cosas útiles entre los edificios colapsados de Puerto Príncipe

PUERTO PRÍNCIPE.— El demoledor golpe que propinó el sismo de 7.3 grados a la empobrecida Haití representa, cuatro días después, sólo la punta del iceberg de una tragedia de proporciones incalculables: la inminente emergencia sanitaria, el caos, la falta de gobierno, el hambre y la desesperanza alimentan una violenta revuelta social, cuyos primeros síntomas ya dominan las calles de esta capital.



Los saqueos, los enfrentamientos entre ciudadanos por alimentos o por la protección de las pocas posesiones que aún conservan algunos, se suman a la aparición de pandillas que recorren las calles en actitud de rapiña.


En Puerto Príncipe, la ciudad más poblada de La Española, la más pobre y marginada, el hedor que despiden cientos, miles de cuerpos en descomposición, domina cada esquina, cada cuadra, lo que parece ya no importar a nadie, en contraste con la falta de alimentos que genera irritación en la gente.


Los gritos y los insultos mutuos se incrementan conforme avanzan las horas. En esta capital se aviva un polvorín que está a punto de estallar.


Una pequeña botella de agua cuesta más de un dólar, pero hay paquetes con seis botellas de un litro y medio que se cotizan en 30 dólares.


El desabasto se recrudeció. No hay nada y se prevén mayores actos de saqueo y violencia a los ya registrados, cuando la ayuda humanitaria fluya. La población ya está desesperada.


En algunos puntos de la ciudad especialistas procedentes de Bélgica son quienes se encuentran más activos, y junto a ellos los de República Dominicana, Costa Rica y Bolivia. Distribuyen alimentos sólo a unos cuantos. La mayoría no alcanza nada. Las filas para recibir comida comienzan a crecer.


En Puerto Príncipe ya se vive una virtual emergencia sanitaria; la muerte es parte de un escenario que cobra tintes macabros. El Hospital General se encuentra atiborrado, y no sólo de heridos, que ya se cuentan por miles, sino de cadáveres que son apilados por decenas en los patios del nosocomio.


Hoy Haití no tiene autoridad y de su presidente, René Préval, no se sabe nada. El único funcionario público que apareció ayer fue el ministro de Salud, Alex Larsen, quien calculó en 50 mil los muertos y en 250 mil los heridos