"José Luis ¿estás ahí? Golpea tres veces", pidió un voluntario de bomberos, imitando los gritos que lanzaba la familia desde el exterior. Pero no hubo respuesta, por lo que se procedió a derribar la construcción de 14 pisos.
CONCEPCIÓN.- La larga espera terminó. Los familiares de José Luis León (26) debieron resignarse esta mañana, luego que las máquinas comenzaran la demolición del edificio Alto Río, que colapsó en el centro de Concepción debido al terremoto que azotó al país hace una semana.
El padre del joven había mantenido la esperanza de encontrarlo durante todos los días y, por lo mismo, no se había movido del frontis del lugar desde que ocurrió la tragedia.
"José Luis ¿estás ahí? Golpea tres veces", pidió un voluntario de bomberos, imitando los gritos que lanzaba la familia desde el exterior. Pero no hubo respuesta, por lo que se procedió a derribar el edificio de 14 pisos.
Según su tío Antonio Fuenzalida, la familia quiso hacer este llamado ya que les habría dado una señal durante la noche.
"Nosotros gritamos su nombre, lo llamamos, creemos que él nos respondió dándonos dos golpes que anoche pudimos escuchar", explicó.
Pese al dolor, Fuenzalida dijo que la familia aceptó la decisión tomada por los bomberos y recordó a José Luis como un joven técnico electrónico, "muy pololo", amante de la cerveza y muy responsable, que sólo hace un mes y medio se había cambiado a ese edificio.
"La noche del terremoto, su amigo le propuso seguir carreteando, pero él pidió que lo fueran a dejar a su departamento, al que llegó a las tres de la mañana, porque tenía turno al día siguiente", relató.
Sin embargo, el terremoto de 8,8 grados Richter registrado media hora después, cambió para siempre sus planes.
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