Advierten RD podría ser afectada por sismo 7.5 grado

Dos sismólogos dominicanos advirtieron este domingo sobre la posibilidad de que un temblor de gran magnitud afecte la República Dominicana, desatado por una gran acumulación de energía sísmica en la falla del Cibao, que destruyó a Santiago y La Vega en 1561.

Leonardo Reyes Madera, presidente de la Sociedad Dominicana de Sismología e Ingeniería (Sodosísmica), y Ernesto Pérez Modesto, asesor coordinar de proyectos de la Oficina Nacional de Evaluación Sísmica y Vulnerabilidad, revelaron que el terremoto esperado en el territorio nacional sería de unos 7.5 grados de magnitud.

Aseguraron que la comunidad científica mundial quedó sorprendida de que el terremoto de 7.0 grado en la escala de Richter ocurriera en la parte suroeste de la isla.

“Tan expuestos estamos, que era en la falla del Cibao donde esperábamos que ocurriría un terremoto de 7.0 grados de magnitud, el que afectó a Haití”, señalaron.

Ambos especialistas explicaron que los sismólogos difieren respecto al tiempo en que este fenómeno podría ocurrir debido a que el último importante ocurrido en el país y que destruyó a Santiago y La Vega fue en 1561-62, por lo que calculan hace 800 años que la falla del Cibao está inactiva, “razón por la cual en esa zona hay una acumulación enorme de energía sísmica”.

Entrevistados en el programa En una Hora, que produce el periodista Manuel Jiménez por Coral 39, Leonardo Reyes Madera, y Ernesto Pérez Modesto, exhortaron a las autoridades a supervisar las edificaciones en el país.

“Esa es una realidad que tenemos toda la vida en la isla, pero no podemos predecirla, pero sí supervisar nuestras edificaciones, antes de que ocurra un gran terremoto, que podría ser hoy o mañana o dentro de cien años, y que seguirán ocurriendo”, dijo Reyes Madera.

Reiteraron que supervisar es obligatorio, porque la filosofía a seguir es salir vivo de un edificio, que no caiga sobre las cabezas de sus ocupantes ni visitantes.

“Por tanto, para nosotros, el momento sugiere comenzar la revisión de nuestras escuelas, edificios de apartamentos donde vivimos, los hospitales, y las edificaciones públicas visitadas a diario por muchas personas”, dijo.