La hambruna por falta de alimentos; la carencia de agua potable, de asistencia médica inmediata, de combustibles, de comunicación telefónica y de electricidad, y la incertidumbre por los heridos, los atrapados entre escombros y desaparecidos, así como por la falta de autoridad civil y militar en Puerto Príncipe, son factores de riesgos que amenazan con la estabilidad social en Haití, tres días después del sismo de 7 grados Richter que destruyó las principales infraesctructuras públicas y privadas, incluido el Palacio de la Presidencia.